Alumnos del curso “Pensamiento Visual” exponen sus trabajos de fin de semestre
Siete muestras de estudiantes del exploratorio del Major IDI (Ingeniería, Diseño e Innovación), de Ingeniería y College, representaron de manera visual cifras oficiales del Gobierno.
Alumnos del curso “Pensamiento Visual” exponen sus trabajos de fin de semestre
Esta obra representa el intercambio de turistas entre Chile y una selección de diez países. Al seleccionar un país con la perilla, el globo terráqueo se mueve para mostrarlo mientras que el avión que está despegando de Chile alarga tanto su cuerpo como sus alas, representando así la cantidad de turistas.
Los trabajos expuestos son parte del curso “Pensamiento Visual” del Major de Ingeniería, Diseño e Innovación, y destacan por el procesamiento y manejo de grandes cantidades de datos que maneja el Estado, como el acceso a la salud y las limitantes que ralentizan el proceso, la cantidad de vino tinto exportado desde Chile a diferentes países, inequidad, turismo, seguridad ciudadana, entre otros.
“Los ingenieros somos muy buenos para calcular y hacer gráficos, pero no tan buenos quizás para explicar la historia que cuentan los datos que es muy importante. Eso tratamos de rescatar en este curso. Nos importa evaluar aspectos como el rigor y el oficio. Nos preocupamos de mejorar, en los alumnos, el método”, afirma Catalina Cortázar, académica que lidera el curso.
“Acá se enseña a tomar datos, limpiarlos con Python, a minarlos, a visualizarlos y así poder contar una historia con ellos. Se les enseña con microcontroladores a traducir esos datos en algo físico, conceptualizar, ligarlo al pensamiento crítico. Tratamos de transferir y humanizar esas cifras, que sacamos de http://datos.gob.cl/”, señala Constanza Miranda, integrante del equipo académico que evaluó los proyectos.
A través de estas representaciones, los estudiantes detectan mayores oportunidades al momento de diseñar e implementar propuestas de innovación y emprendimiento.
Uno de los trabajos graficó la correlación entre las comunas y las opciones de emprendimiento con créditos estatales, que tienen sus habitantes. “Nos dimos cuenta que mientras más rica es una comuna, más difícil es que le aprueben un crédito para emprender”, explica María Gracia Lagos, alumna de primer año.
Otro trabajo graficó la demanda energética de cada región de Chile y la cantidad de molinos de viento que son necesarios construir para satisfacer esa demanda. A través de un juego arcade, se puede levantar un molino de cierta cantidad de niveles dependiendo de la necesidad de la región. Es decir, si la región de Los Ríos requiere 14 pisos de molino en el juego, se traduce en 14.000 molinos que debieran construirse en la realidad.
