
Nueva plataforma Open Sea Lab potenciará investigación sobre energía marina
Gracias a su extensa costa, Chile es uno de los países más privilegiados del mundo en cuanto al recurso energético disponible para la extracción de energías marinas. La inminente disminución en el uso de combustibles fósiles y la diversificación de la matriz energética de nuestro país, abre una gran oportunidad para el desarrollo tecnológico e incorporación de energías de corrientes de marea y de oleaje.
Durante estos últimos cinco años, investigadores del Centro de Excelencia Marine Energy Research & Innovation Center de Energía Marina SpA (MERIC) han establecido las bases científicas para la implementación de energías marinas como parte del desarrollo sustentable del país.
En esta entrevista, el académico del Departamento de Ingeniería Hidráulica y Ambiental y coordinador científico de MERIC dentro de la UC, Cristián Escauriaza, nos cuenta sobre el Centro, las investigaciones que se realizan y el proyecto Open Sea Lab: el primer convertidor de energía marina a escala real en Latinoamérica el cual busca impulsar los estudios científicos interdisciplinarios.
¿Qué rol juega el Centro de Excelencia MERIC en la investigación de energías marinas?
MERIC es el centro de excelencia dedicado fundamentalmente a la investigación de energías marinas, y el primero de su tipo en el continente. Originalmente financiado por Corfo, las empresas Naval Energies y Enel Green Power, la Pontificia Universidad Católica de Chile participa como actor científico principal, junto a la Universidad Austral de Chile. Aquí, profesores e investigadores de varias facultades hemos estudiado muchos aspectos científicos y aplicados que se relacionan a la energía que puede obtenerse del océano.
¿Qué investigaciones se están realizando desde la universidad?
Académicos de la Escuela de Ingeniería, la Facultad de Química y la Facultad de Ciencias Biológicas UC hemos estado trabajando en conjunto y haciendo investigación en temas de energía de corrientes de marea y de oleaje, y su relación con procesos ambientales relacionados con la sustentabilidad de la costa. En la extracción de energía de corrientes de marea se aprovecha la velocidad del flujo que se crea en canales costeros cuyo flujo está influenciado por las mareas.
La extracción de energía del oleaje, por otra parte, proviene del movimiento oscilatorio de las olas en la costa. Aquí es donde se enmarca el proyecto Open Sea Lab (OSL).
¿De qué se trata este proyecto?
Es una plataforma abierta de investigación del océano costero, que tiene por objetivo impulsar nuevos estudios científicos interdisciplinarios y el desarrollo de energías del oleaje. Recientemente acabamos de instalar un dispositivo de generación semejante a una boya oceanográfica frente a la Estación Costera de Investigaciones Marinas (ECIM UC) en Las Cruces, que entregará energía a una plataforma de monitoreo diseñada para recopilar información en tiempo real sobre el ambiente marino y el potencial energético, que es la primera en su tipo en América Latina.
Y agregó que:
La energía que se genera mantiene en funcionamiento a los distintos instrumentos como medidores de velocidad del flujo, oleaje, temperatura, turbidez, oxígeno, entre otros, que se complementan con un radar banda-X y una estación meteorológica en ECIM.
¿Qué harán con los datos recopilados?
La información va a estar disponible para todos los investigadores que necesiten usarla. Los datos y la observación de procesos costeros nos permitirá avanzar en el trabajo de investigación asociado a los objetivos de MERIC, pero también creemos que tendrá un impacto significativo en otros temas académicos. Junto al profesor Sergio Navarrete, de la Facultad de Ciencias Biológicas, estamos diseñando un nuevo curso para nuestros estudiantes. La idea es que estudiantes de Ingeniería y de Biología Marina UC puedan trabajar juntos abordando aspectos físicos y ecológicos de la costa, desarrollando proyectos interdisciplinarios a partir de los datos medidos en el OSL.
Esto se podría definir como un hito en la investigación aplicada en energías marinas.
La instalación de este dispositivo de prueba en nuestro país es sin duda un paso fundamental en la investigación aplicada de las energías marinas en condiciones oceánicas reales. Nos permitirá adquirir experiencia en la medición de terreno y en el mantenimiento de este tipo de sistemas tecnológicos. Esto, sumado a la participación de diferentes investigadores de nuestra universidad, nos da una gran oportunidad para la formación de profesionales integrales, y confirma lo necesario que es la interdisciplina para abordar problemáticas actuales, tanto a nivel nacional como internacional
¿Cuáles son los principales desafíos de este proyecto?
Desde un punto de vista más técnico, el principal desafío es el despliegue de plataformas de observación y proyectos de energía en el océano. El diseño de tecnologías que puedan permanecer en el agua por mucho tiempo, con bajo mantenimiento, que sean sustentables y respetuosas con el medio ambiente, será el gran reto. En este contexto, a través del Open Sea Lab, en MERIC buscamos dar respuestas tecnológicas certeras, que permitan facilitar la entrada de energías marinas a nuestro país y descubrir su inmenso potencial, que hasta el día de hoy no ha podido ser aprovechado.